La sábila (aloe vera) hoy en día es aplicada para varios usos curativos para nuestra piel. Uno de ellos es el tratamiento de primeros auxilios: puede disipar el dolor y reducir la posibilidad de infección y de cicatrices, mientras mejora de forma excelente el proceso curativo. Además, debido a que la sábila se absorbe con rapidez, no entorpece cualquier tratamiento médico posterior que se requiera.

Los ünguentos de sábila están particularmente prescritos para el tratamiento continuo de quemaduras, porque contienen lubricantes que ayudan a balancear los efectos astringentes del jugo.

En siglos pasados, la sábila fue uno de los pocos conocidos inhibidores de bacterias que podían reducir el mal olor del cuerpo. Los cazadores nativos untaban sus cuerpos con el jugo para impedir que los animales descubrieran su olor.